Hablo del LLaima imponente macizo de la región de la Araucania donde precisamente vivo,el cual por estos días arroja lo mas ardiente que por dentro tiene, ojala pudieramos con ese mismo ardor defender y cuidar nuestro mundo. Que hace la diferencia que es parte de la naturaleza con que fue creado y cuanto ocurre a nuestro alrededor que provocamos sin medir sus efectos y sus consecuencias, tiemblo junto con él al pensar en todo lo que será destruido si decide dejarse sentir en todo su esplendor, pero sinceramente mas tristeza me da verme enfrentada a lo mas hermoso que me ha dado Dios y que no he sabido cuidar, esta tierra que es tambien la de todos y que seguira muriendo junto con nosotros sino luchamos por conservarla, levanto abiertamente mi bandera de batalla que es el presente y futuro de mis hijos y de todas las generaciones.
Asi fueron hechos el cielo y la tierra y todo lo que hay en ellos y vio Dios que esto era bueno.
Celacanto.
domingo, 13 de enero de 2008
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